Qué le sucede a un corazón roto

Qué le sucede a un corazón roto

Qué le sucede a un corazón roto
5 minute read time

Read in EnglishMorir por un corazón roto parece ser la frase de una canción de música country. Pero todos hemos escuchado alguna historia de parejas de ancianos que compartieron juntos toda su vida en la que cuando fallece uno de los dos, el otro muere al poco tiempo, en unas horas o en un día. ¿Es eso realmente posible?

Resulta que un corazón roto puede ser mucho más que una metáfora.

Síndrome del corazón roto

El estrés emocional súbito —causado por dolor, miedo, ira o conmoción— puede causar insuficiencia cardíaca. El término médico para describirlo es cardiomiopatía por estrés. También se denomina a menudo como "síndrome del corazón roto" y afecta principalmente a las mujeres.

Los investigadores de la Universidad Johns Hopkins estudiaron a pacientes que, luego de sufrir una situación de estrés emocional repentino, presentaron síntomas clásicos de un ataque de corazón a pesar de ser saludables y carecer de antecedentes de enfermedades cardíacas.

El estudio comprobó que estos pacientes tuvieron en la sangre niveles constantemente elevados de las hormonas del estrés epinefrina —también llamada adrenalina— y norepinefrina, las cuales parecían causar un debilitamiento significativo del músculo cardíaco.

Desde hace décadas, los científicos descubrieron que el cuerpo libera adrenalina para responder a situaciones de estrés. Esta respuesta acelera la frecuencia cardíaca y tensiona los músculos preparando a la persona para pelear o huir de una amenaza. Para algunas personas, esa descarga de adrenalina puede ser mayor de lo que el corazón puede soportar.

El daño provocado genera síntomas muy similares a los de un típico ataque al corazón, incluidos dolor de pecho, líquido en los pulmones y falta de aire. De hecho, el síndrome del corazón roto puede ser diagnosticado erróneamente como un ataque al corazón, porque los síntomas y los exámenes médicos que se realizan para detectarlo son similares. Pero, a diferencia de un ataque al corazón, el síndrome de corazón roto no presenta señales de arterias cardíacas bloqueadas.

En su lugar, una parte del corazón aumenta de tamaño temporalmente y deja de latir correctamente. El resto del corazón actúa normalmente o incluso con contracciones más fuertes. Esto puede provocar insuficiencia cardíaca muscular severa a corto plazo. Pero, generalmente, se puede tratar y la mayoría de las personas se recuperan por completo. Lo que aún no está claro es por qué afecta a algunas personas y a otras no.

Conexión entre salud mental y salud cardíaca

Hoy en día sabemos cuáles son los puntos básicos para proteger al corazón: controlar la presión arterial y los niveles de colesterol; controlar la diabetes; seguir una alimentación saludable y mantener un peso saludable; limitar el consumo de alcohol; y, no fumar.

Sin embargo, también existen otros factores que afectan al corazón.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés)  señalan que, además del síndrome de corazón roto, los estudios indican que la salud mental y cardiovascular están relacionadas de muchas maneras.

Algunos problemas típicos de salud mental que pueden afectar la salud cardíaca incluyen:

  • estrés duradero
  • depresión y ansiedad
  • trastorno de estrés postraumático (PTSD, en inglés)

Estas condiciones de salud mental pueden tener un efecto indirecto en la salud cardíaca, aumentando la probabilidad de comportamientos riesgosos. También pueden tener un impacto físico directo en el corazón.

El estrés, la depresión, la ansiedad y el trastorno de estrés postraumático pueden causar: un incremento en el ritmo cardíaco y la presión arterial; una reducción en el flujo de sangre hacia el corazón; y, niveles más altos de cortisol, la hormona del estrés del cuerpo.

Con el tiempo, estos efectos pueden provocar acumulación de calcio en las arterias, enfermedades y cardíacas.

A su vez, un episodio cardíaco como un ataque o un derrame cerebral puede causar problemas de salud mental como depresión, ansiedad y trastorno de estrés postraumático.

Si tienes estrés prolongado, ansiedad, depresión o cualquier problema de salud mental, habla con tu médico de cabecera u otro profesional médico. Es importante buscar ayuda para tratar problemas de salud mental y seguir los pasos indicados para manejarlos. El tratamiento y el manejo de los condiciones de salud mental pueden incluir de cambios en el estilo de vida, en el asesoramiento y apoyo y en los medicamentos.

Enfrenta el estrés

La vida está llena de experiencias difíciles y estresantes. El estrés crónico puede debilitar el sistema inmune y provocar problemas de salud. Incluso, el estrés moderado puede empeorar otras enfermedades. Y, si no puedes evitar el estrés, al menos puedes aprender a manejarlo mejor.

Existen pasos que puedes seguir para combatir el estrés antes de que te abrume. Para ayudar a cuidar tu salud y proteger tu corazón, prueba estos consejos:

  • Duerme lo suficiente. La falta de sueño puede afectar el estado de ánimo, el nivel de energía y la salud física.
  • Haz ejercicio. La actividad física ayuda a eliminar el estrés y a reducir el riesgo de estar deprimido.
  • Aprende métodos de relajación. Intenta practicar yoga, meditación, respiración profunda u otros métodos para reducir el estrés.
  • Enfrenta las situaciones estresantes. No dejes que te abrumen. Podrías organizar una reunión familiar o aprender métodos para manejar mejor tu trabajo.
  • Cuídate. Haz cosas que te hagan sentir bien. Pasea al aire libre. Duerme una siesta. Escucha música. Visita a tu familia o amigos.
Fuentes: Cardiomyopathy, leaving site icon Johns Hopkins Medicine; Broken Heart Syndrome, leaving site icon Johns Hopkins Medicine; Is Broken Heart Syndrome Real?leaving site icon American Heart Association, 2024; About Heart Disease and Mental Health, leaving site icon Centers for Disease Control and Prevention, 2024; How to Prevent Heart Disease, leaving site icon U.S. National Library of Medicine, 2024; Is broken heart syndrome becoming more common?, leaving site icon Harvard Medical School, 2022; Stress and Heart Health, leaving site icon American Heart Association, 2024 

Originalmente publicado 2/4/2022; Actualizado 2024